28 de junio

SALMO 2 NVI

¿Por qué se sublevan las naciones,

y en vano conspiran los pueblos?

Los reyes de la tierra se rebelan;

los gobernantes se confabulan contra el Señor

y contra su ungido.

Y dicen: «¡Hagamos pedazos sus cadenas!

¡Librémonos de su yugo!»

El rey de los cielos se ríe;

el Señor se burla de ellos.

En su enojo los reprende,

en su furor los intimida y dice:

«He establecido a mi rey

sobre Sión, mi santo monte».

Yo proclamaré el decreto del Señor:

«Tú eres mi hijo», me ha dicho;

«hoy mismo te he engendrado.

Pídeme,

y como herencia te entregaré las naciones;

¡tuyos serán los confines de la tierra!

Gobernarás a las naciones con puño de hierro;

las harás pedazos como a vasijas de barro».

Vosotros, los reyes, sed prudentes;

dejaos enseñar, gobernantes de la tierra.

Servid al Señor con temor;

con temblor rendidle alabanza.

Besadle los pies, no sea que se enoje

y seáis destruidos en el camino,

pues su ira se inflama de repente.

¡Dichosos los que en él buscan refugio!