Una pequeña congregación del Distrito Hispano ha liderado el camino desde el pasado octubre de 2018 al dar la bienvenida en su iglesia a los forasteros.
Movida por el amor de Cristo hacia su prójimo, la Iglesia El Buen Pastor en Mesa, Arizona junto con sus pastores los Reverendos Héctor y Cecilia Ramirez iniciaron un ministerio de compasión. Debido a la gran crisis causada por el número de inmigrantes que vienen a los Estados Unidos para buscar asilo o refugio, Inmigración y Control de Aduanas (ICE) se acercó a varias iglesias de Arizona para ayudar a las familias inmigrantes.
Los funcionarios de ICE generalmente llevaban a los inmigrantes a las estaciones de autobuses una vez que su estado ha sido procesado. La mayoría de las veces, las familias no tenían idea de qué hacer después. ICE reconoció que la participación de las iglesias aseguraría que los menores y los padres puedan permanecer juntos en lugar de que estos sean llevados a los centros de detención.
La iglesia del Buen Pastor respondió a la solicitud de ICE, pero pronto se dieron cuenta de que enfrentaban un gran desafío: además de alimentar a las familias, debían proporcionar duchas, artículos de aseo, ropa limpia y, a veces, un lugar para dormir.
Parte de la rutina de los inmigrantes en la Iglesia incluye asistir a un servicio en el santuario, donde escuchan el mensaje de Esperanza. A través de este mensaje ofrecido regularmente, casi 300 hombres, mujeres y niños han depositado su fe en Cristo.
Por la noche, el santuario se convierte en dormitorios temporales donde las personas generalmente se quedan hasta tres días. Los inmigrantes también reciben tres comidas cada día hasta que se desplazan a su próximo destino.
Además de proporcionar comida y un lugar para quedarse, la iglesia ha ayudado a comprar boletos de avión o de autobús, ha ayudado a que las personas accedan al modo de transporte correcto, les han proporcionado bocadillos para el viaje y les han entregado documentos con instrucciones en inglés para que puedan pedir ayuda cuando viajan en avión o autobús.
Dios ha suplido una gran cantidad de voluntarios: cocineros, médicos, enfermeras, personas para distribuir ropa, quienes se comunican por teléfono con los familiares de los inmigrantes, así como donaciones como artículos de aseo personal, juguetes, ropa de cama, mantas y almohadas.
El Pastor Ben Margeson de GracePoint Wesleyan Church en Brookings, Dakota del Sur, llevó a un equipo de voluntarios a la Iglesia El Buen Pastor para ayudarles. La Rev. Ashley Jennings y la Iglesia Village en Red Rock, Arizona, han hecho donaciones así como trabajo voluntario, al igual que la Iglesia El Monte Wesleyan Christian (El Monte, California) con el Rev. Asdrúbal Chacoon, la Iglesia Monte de Sion (Los Angeles, California) con el Pastor Daniel Núñez y los Pastores Eduardo y Paola Lopez.
Los pastores Ramírez están agradecidos por el apoyo brindado por los pastores y congregaciones. Reconocen que Dios ha sido fiel y ha provisto todo lo que han necesitado para amar a sus vecinos. La Iglesia El Buen Pastor aprecia enormemente sus oraciones para que este trabajo compasivo continúe.
