Ofreciendo consuelo

En su libro, People Fuel, el Dr. John Townsend destaca 22 nutrientes que contribuyen a nuestro bienestar. Según el Dr. Townsend, el consuelo es el nutriente relacional que mejor aborda la pérdida (p. 97). 2 Corintios 1 destaca cómo el consuelo se convierte en un proceso recíproco. Recibimos consuelo y, a su vez, ofrecemos consuelo a los demás.

Esta presentación de Floreciendo en 5; se centra en el nutriente del consuelo. Considere estos cinco pasos como diferentes componentes del consuelo.

  1. Ofrezca amor y presencia incondicional. Townsend observa acertadamente que Dios no nos creó “para perder, y no nacemos con las habilidades para lidiar con nuestras pérdidas” (p. 98). En momentos de pérdida, necesitamos que otros nos ayuden a sobrellevar la carga del duelo. Por ejemplo, María y Marta acudieron a Jesús después de la muerte de su hermano Lázaro (Jn. 11:3). Además, muchos judíos de la zona buscaron consolar a María y Marta (Jn. 11:31). Cuando Jesús y sus discípulos llegaron a Betania, la identidad de Jesús como la «resurrección y la vida» consoló a María y Marta. ¿Con qué facilidad recurres a un amigo que te apoya para recibir consuelo en momentos de pérdida? ¿Con qué frecuencia ofreces consuelo a otras personas en momentos de pérdida?
  2. Apoya el arduo trabajo del duelo. El duelo es agotador. Quienes lo atraviesan experimentan tristeza, ira, culpa, soledad, fatiga o anhelan recuperar lo perdido. El trabajo de duelo permite despedirse para que quien sufre pueda volver a estar abierto a nuevas oportunidades y personas. Tu presencia amorosa facilita y apoya el proceso. ¿Qué tan bien comprendes el proceso de duelo, tal como se expresa emocional, cognitiva y conductualmente? ¿Puedes «estar con» la otra persona sin intentar cambiar cómo se siente?
  3.  Deja que la persona en duelo dirija la conversación. El mejor consuelo se ofrece en silencio. Intentar animarla invalida su tristeza. En lugar de intentar animarla, aborda su tristeza. Deja que tu postura, tono de voz, expresiones faciales y palabras digan: «Estoy aquí para ti en todo tu dolor». Sigue el consejo de Romanos 12:15: «Regocijaos con los que se alegran, llorad con los que lloran». Si la otra persona quiere hablar de su tristeza, sigue su ejemplo. ¿Puedes sentarte con alguien triste y no decir nada para animarlo?
  4. Sintoniza con la tristeza. Sintonizar es el proceso de ser consciente y conectar con los sentimientos del otro para crear sincronía emocional. Al sintonizar con las emociones de la persona en duelo, le brindas consuelo. Validas sus emociones mediante este proceso cálido y amable. Ante el intenso dolor de María y Marta, Jesús sintonizó con su tristeza y expresó su empatía con lágrimas (Jn. 11:35). ¿Puedes estar plenamente presente y sintonizar con la tristeza de quienes han sufrido una pérdida sin dejarte abrumar por sus emociones? 
  5. Tómate tiempo para recuperarte. Al ofrecer consuelo a otra persona, gastas energía. Estás sintonizando con su tristeza. La escuchas con empatía. Le prestas toda tu atención. Y al separarte, quizás necesites tomarte un tiempo para ti mismo y recargar energías. Quizás experimentes tu propia sensación de impotencia y pérdida. Reponer fuerzas puede ser tan breve como salir a respirar aire fresco y tomarse un respiro de la intensa conexión con la tristeza. O puede necesitar más que un breve descanso. ¿Cómo reponer fuerzas después de brindar consuelo a alguien en duelo?

 

Recursos

John Townsend, People Fuel, Chapter 7, Quadrant 1: Be Present, Zondervan

Kristi Kanel, A Guide to Crisis Intervention, Chapter 6, Crisis of Loss, Cengage

8 ways of providing comfort – https://wecareonlineclasses.com/8-ways-of-providing-comfort/

What not to say to comfort a friend.https://youtu.be/Jdtzuo63oiM?si=q8fw79jEKJmJKM-g

 

Curador de Contenido: Carla Working
Traducido por: Edgar Chacón
Editora Ejecutiva: Johanna Rugh